Presentada en la edición 19 del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) dentro de la Sección de Largometraje Mexicano, llega a carteleras comerciales la cinta Estación catorce (2021), escrita y dirigida por Diana Cardozo, que en este filme decide abordar el tema de la violencia y sus consecuencias a través de la visión inocente de un niño y la frágil relación con su padre en este peculiar poblado ubicado en San Luis Potosí.
Esta nueva ficción de Cardozo, participante también de la sexta edición de Impulso Morelia, nos presenta a Luis (Gael Vázquez), un niño que poco a poco descubre el crudo mundo que lo rodea, todo después de que una balacera se desata en este pequeño poblado cercano al paso del tren. Este muchacho de tan solo siete años confronta por vez primera la muerte, así como la vulnerabilidad y un universo de situaciones que poco a poco son veladas en el guion.
A través de su mirada infantil, Luis enfrenta estos problemas, moviéndose entre juegos y perplejidades donde la cruenta realidad atraviesa un filtro pueril que poco a poco se va resquebrajando, revelando una verdad dura: la de un México encerrado en la violencia y el peligro que eso deriva en todos los habitantes de una nación que no puede sacudirse de encima esos duros fantasmas del narco ni de la agresión contra sus ciudadanos, mucho menos de las masculinidades tóxicas.
Si bien el guía de este viaje es Luis, son las interacciones que tiene con su familia, sus compañeros y esa peculiar figura paterna de Manuel (José Antonio Becerril), que constantemente es cuestionado, acusado de ser ladrón, trastocado por un machismo en el área donde evade sus problemas al enfrentarse a su mujer e hijos de maneras agresivas. Cardozo va desgranando ese punto poco a poco hasta revelar que el fenómeno de la violencia va más allá de las armas y ejecuciones, mostrando que también se contagia a los núcleos sociales, rompiéndolos por dentro hasta detonar.